En la sesión que inaugura el segundo cuatrimestre del Club de Lectura IEJI, tendremos el honor de contar con Javier Moro, autor del libro "A flor de piel" que figura en el cronograma de lecturas. Dicho cronograma está publicado en este blog.
Javier Moro, premio Planeta 2011 por su libro "El imperio eres tú" es un escritor de sólida trayectoria y cuyos libros han sido prácticamente todos auténticos best-sellers. No quisiera que esta palabra pudiese estar asociada a libros comerciales porque Javier Moro es un escritor que, aunque sabe atraer a un gran número de público por el interés de sus temas, es algo más que un escritor de best-sellers a lo Ken Follett o María Dueñas. Nuestro escritor, ante todo, prefiere basar sus libros en personajes reales cuyas vivencias son, sin duda, mucho más apasionantes que cualquier personaje de ficción, pensemos en Sonia Gandhi o la bailarina española Anita Delgado, mujeres que nada hacía presagiar que sus vidas iban a ir por derroteros insospechados, por no hablar de Isabel Zendal, una de las protagonistas del libro que comentaremos. Este hecho contribuye a la espectacularidad del relato y, al mismo tiempo, nos hace sentir una gran empatía con los personajes. Así, "El sari rojo", mi novela favorita de todas las que ha escrito Javier Moro nos muestra a Sonia Maino, una chica italiana de origen humilde, que conoce a Rajiv Gandhi, el hijo de la todopoderosa Indira Gandhi en Cambridge mientras hacía un curso de inglés, decidiendo por amor irse con él a la India, un país del que no sabía nada pero cuyo destino llegará a dirigir tanto en público como en la sombra. Este libro fue censurado en la India por la propia Sonia Gandhi, intentando impedir su publicación, ya que no era de su agrado que se pusieran en la palestra sus orígenes italianos y católicos, entre otros temas.
Foto derecha: Sonia Gandhi el día de su boda con Rajiv Gandhi.
Javier Moro escribe de una manera propia y personal, sus novelas oscilan entre el reportaje, la biografía y la novela, lo que les confiere una gran objetividad, todo ello unido a un estilo contenido que abunda en la veracidad.
En "A flor de piel", encontramos estas características narrativas junto a una gran claridad expositiva en la descripción del trayecto de la Real Expedición Filantrópica de la Vacuna, una hazaña sin precedentes, muy propia de un siglo XVIII convulso que se debatía entre la modernidad y la tradición, entrando ya en el siglo XIX, con los vientos de la Ilustración soplando fuerte y la invasión napoleónica de fondo.
Es éste un libro donde Javier Moro no evita ningún tema, desde la descomposición del imperio español en América, hasta las dificultades de los hombres de ciencia, valedores de los valores de la Ilustración, ante las actitudes cerradas y profundamente conservadoras de los hombres de ciencia españoles. También nos muestra el retraso secular y la extrema pobreza de la población rural en Galicia, que no distaba demasiado de la de otros lugares de España. Así, las primeras líneas del libro nos sitúan en el contexto económico de la familia de Isabel Zendal, "pobres de solemnidad". Este imperio español en plena decadencia está bien descrito en la América Hispana donde vemos a esos virreyes corruptos cuyo máximo exponente es el virrey Iturrigaray, dedicado en cuerpo y alma a su enriquecimiento personal y nada dispuesto a recibir a Balmis, ni a acatar las órdenes del Rey de España, Carlos IV.
Los tres personajes principales de la novela: Isabel Zendal, Balmis y Salvany son muy poderosos y narrativamente un auténtico regalo. Salvany y Balmis, dos médicos ilustrados que deciden llevar la vacuna a los territorios de ultramar, asolados por la enfermedad de la viruela e Isabel Zendal, una mujer inteligente, valiente y férreamente independiente, a pesar de vivir en una época donde la mujer seguía desempeñando un papel secundario en la sociedad. Los tres personajes están descritos con sus luces y sus sombras, sus dudas y sus frustraciones, todo ello sin disminuir la valentía y la generosidad que animaba esta magna empresa.
Como tendremos ocasión de hablar con el propio autor sobre "A flor de piel", no me extenderé más sobre el particular.
Aunque el siglo XVIII español carece de la luminosidad, la innovación y el carisma de las literaturas inglesa y francesa, fue, sin embargo, muy intenso en lo que al mundo intelectual se refiere. En lo literario, los escritores españoles del XVIII se rebelaron contra la guerra, la superstición, el fanatismo, la tradición anquilosada abogando por la moral laica y la libertad intelectual, oponiéndose a la opresión en todas sus formas (Blanco Aguinaga, Rodríguez Puértolas, Zavala en "Historia social de la literatura española, vol. I). Los escritores que apoyaban las reformas eran llamados los afrancesados, entre otros, Jovellanos, Feijóo o Moratín.. El siglo XVIII español no tiene buena fama en lo literario, demasiados textos didácticos y regeneradores ante el marasmo social español. Fray Benito Jerónimo de Feijóo, el "Icaro de las ciencias sin alas", adoptó el estilo epistolar y divulgativo con la intención de erradicar la superstición y la ignorancia. En su ensayo "Honra y provecho de la agricultura", dice de los campesinos de Asturias y Galicia (ahí están los orígenes de Isabel Zendal)::
"En esta tierra no hay más que gente hambrienta ni más desabrigada que los labradores".
Feijóo, a pesar de su condición de religioso, abogaba por el laicismo, quería arreglar los problemas en esta tierra, la espiritualidad únicamente era cosa de Dios. Fue también un gran defensor de los indígenas cuya explotación y maltrato siempre denunció. Sus obras más renombradas son: "El Teatro Crítico" y sus cartas. La figura de Feijóo se refleja en Ricardo, el arzobispo de Puebla, el gran amor de isabel Zendal.
También Leandro Fernández de Moratín fue un afrancesado, al igual que Jovellanos. Intelectuales que entendieron que España se estaba quedando atrás, que la pobreza, la superstición y una Iglesia inmovilista, centrada en sus privilegios e influencias era un lastre para una nación que debía tomar el rumbo de la modernidad. Su obra de teatro más conocida "El sí de las niñas", reivindica el amor como razón principal para contraer matrimonio y no la búsqueda del mejor partido financiero. Asimismo, también reivindicó la igualdad de la mujer a la hora de tomar sus propias decisiones.
Moratín Jovellanos
Me gustaría también mencionar a Cadalso, el autor de las "Cartas Marruecas". A imitación de las "Lettres Persanes" de Montesquieu, las "Cartas Marruecas" son un compendio de las ideas de Cadalso, fuertemente influidas por las Luces. Son noventa cartas escritas por dos marroquíes, Gazel y Ben-Beley y un español, Nuño, trasunto literario de Cadalso. El autor aprovecha para repasar todo el tejido social y humano de la España de la época, entendiendo que son necesarias reformas en una estructura patriarcal y estamental inmovilista. Las "Cartas marruecas" son una lectura deliciosa que, al igual que "A flor de piel", nos traen ecos de nuestra propia época.
Cadalso
No obstante, quisiera dejar constancia que estos hombres, cuya acción fue meritoria y que merecen nuestro máximo respeto puesto que vivieron en una época de grandes contradicciones y cambios drásticos, desgarrados entre una modernidad que no acababa de llegar y una tradición muy conservadora, no eran realmente revolucionarios, sino reformistas. No aspiraban a cambiar la sociedad sino a reformarla. El libro de Javier Moro nos lo muestra muy claramente, Balmis y Salvany no aspiran a cambiar el mundo en el sentido de revolución sino a mejorarlo y a crear las estructuras susceptibles de permitir que estas mejoras duren en el tiempo como por ejemplo, la formación de personal sanitario para inyectar las vacunas y hacer su seguimiento o las Juntas de Vacunación.
Una novela que ha tenido bastante éxito y que explica bien la contradicción española en el siglo XVIII es "Hombres buenos" (Alfaguara) de Arturo Pérez-Reverte que narra la aventura de dos académicos, el bibliotecario Hermógenes Molina y el brigadier Pedro Zárate y Queralt, los hombres buenos del título, que intentan traer a España la colección completa de la Encyclopédie a la Real Academia española. Ambos tendrán que enfrentarse a los obstáculos que otros académicos ponen en su camino para evitar la llegada de dicha obra. Es, probablemente, lo mejor que ha escrito Pérez-Reverte hasta la fecha.
No quisiera dejar de mencionar otras obras de Javier Moro, de igual calidad a la que comentaremos en el Club de Lectura, la ya mencionada "Pasión india", donde nuestro autor retrata la apasionante vida de Anita Delgado Briones, conocida como la princesa de Kapurthala, de resonancias exóticas. Anita Delgado era una bailarina malagueña, pero que conoció y se codeó con los pintores e intelectuales de la época como Valle-Inclán, Pío Baroja o los pintores Orozco y Julio Romero de Torrres. Enamoró al marajhá de Kapurthala bailando en la boda de Alfonso XIII, siguiéndole a la India. Javier Moro no cae en ningún momento en la tentación de convertir esta curiosa historia de amor en un biopic romántico y azucarado, lo que hace la lectura de este libro una experiencia apasionante, además de hacernos vivir un viaje por la India de la época, sin escatimar detalles, por escabrosos que sean.
"El imperio eres tú", novela por la que ganó el Premio Planeta en 2011, es la historia de Pedro I de Brasil y IV de Portugal, convertido en emperador del Brasil a los veintitrés años. Hombre vital, amante de las mujeres y de la buena vida, acabó como soldado en una guerra, hastiado del poder y de las intrigas, intentando merecer su condición de rey. Este libro volvió a dar credibilidad al Premio Planeta que antes de premiar a Javier Moro, había perdido cualquier amago de calidad, otorgándolo a obras muy mediocres, lo que sumió a dicho premio en el descrédito. "El imperio eres tú" salvó al Premio Planeta del oprobio al que parecía condenado.
Al sabio oficio de escribir de Javier Moro, se suma una exhaustiva documentación e investigación histórica que consiguen hacer de sus libros no solo un festín literario sino también el más agradable y ameno manual de historia. La bibliografía que figura al final de las obras muestra bien claramente este ingente trabajo de búsqueda.
Quisiera señalar también que Javier Moro ha sido o es, también productor de cine, concretamente de las películas "Crónica del Alba" y "Valentina", basadas en la obra de Ramón J. Sender. Ambas películas son una hermosa adaptación de la obra original "Crónica del alba".
Otros libros de Javier Moro son:
- "Senderos de libertad", co-escrito con Dominique Lapierre (Seix-Barral).- "El pie de Jaipur" (Seix-Barral).
- "Las montañas de Buddha" (Seix-Barral).
- "Era medianoche en Bhopal", también co-escrito con Dominique Lapierre (Planeta).
Javier Moro pertenece a una estirpe de escritores. Es sobrino de Dominique Lapierre, con el que ha escrito varios libros y primo de Alexandra Lapierre, hija de Dominique.
Dominique Lapierre es autor de libros que impactaron muchísimo a los lectores tales como "La ciudad de la alegría", "Más grandes que el amor", un libro formidable sobre la investigación en la curación del virus del sida, "Esta noche la libertad", la epopeya de la independencia de la India del imperio británico en 1947, o la obra "Oh, Jerusalén!, la cual, más allá de su condición de best-seller, se ha convertido en clásico por su finísimo análisis de la creación del estado israelí y el consiguiente conflicto palestino-israelí, más vigente que nunca. Una obra imprescindible para conocer las razones de un conflicto tan doloroso como, al parecer, insoluble.
Cartel de la película "La ciudad de la alegría" basada en la obra homónima de Dominique Lapierre
Asimismo, Javier Moro es primo hermano de una autora que adoro: Alexandra Lapierre, hija de Dominique. Alexandra ha escrito numerosos libros a cuál más interesante pero yo quisiera mencionar especialmente cuatro, por su enorme interés y por la fuerte personalidad de los personajes descritos en estos libros. Son "Artemisia", "Grandes aventureras", "La extraordinaria vida de William Petty" y "Fanny Stevenson".
"Grandes aventureras" relata la vida de 31 mujeres apasionantes, que decidieron llevar las riendas de sus vidas sin renunciar a su feminidad pero sin someterse a reglas que les impedían alcanzar sus objetivos y ambiciones. Es un libro magníficamente escrito, retrata desde Isak Dinesen, la autora de "Memorias de Africa", hasta Catalina de Erauso, la monja alférez en la España del Siglo de Oro, pasando por Alexine Tinne, la aristócrata holandesa que recorrió los desiertos de Egipto. Un libro inolvidable.
"Artemisia" es la biografía de Artemisia Gentileschi, una pintora que vivió a principios del siglo XVII. Artemisia fue víctima de una violación por el pintor Tassi. Como, a pesar de haberla deshonrado, no se casó con ella, fundamentalmente porque ya estaba casado, Artemisia lo llevó a juicio. Las actas del proceso muestran la humillación a la que fue sometida una mujer que había sido violada y ultrajada, convirtiéndose prácticamente en culpable de la violación. Artemisia Gentileschi es un icono feminista. Dos cuadros muy famosos de esta pintora, "Judith decapitando a Holofernes" y "Susana y los viejos", han sido interpretados en clave de ese episodio traumático por su crudeza pictórica. Alexandra Lapierre consigue un retrato de la pasión, la rabia y la impotencia de Artemisia junto a la delicadeza de su talento, sin obviar las dificultades casi insuperables que las mujeres han tenido a lo largo de la historia para que sus cualidades y capacidades fuesen reconocidas.
"La extraordinaria vida de William Petty" es simplemente eso, extraordinaria y Alexandra la cuenta magníficamente. El subtítulo de la obra es ya todo un anticipo de lo que vamos a encontrar: "Aventurero, erudito y seductor". William Petty era un humilde muchacho nacido en Westmoreland, en la peligrosa frontera entre Escocia e Inglaterra, que a fuerza de tesón y gracias a su privilegiada inteligencia, consiguió entrar en Cambridge donde estudió latín, matemáticas,... pero donde también se ordenó como pastor de la fe anglicana, actividad que ejerció durante poco tiempo. En 1613 entró al servicio del Conde Arundel como preceptor y ahí empezó todo. El conde Arundel era un notable coleccionista de arte que adiestró a Petty para que se convirtiese en su agente de arte, eufemismo para designar el pillaje de pinturas, esculturas y todo tipo de antigüedades. Este libro es una maravilla, Alexandra Lapierre recrea toda la ambigüedad del personaje, pero también el contexto histórico que le tocó vivir y describe muy bien esa Inglaterra que ya empezaba a construir su imperio, la progresiva entrada del capitalismo, la incipiente revolución industrial, y todo ello con fondo de aventuras y arte.
El Conde de Arunder y su hijo
Por último, "Fanny Stevenson: entre la pasión y la libertad" es la historia de la mujer de Robert Louis Stevenson. La norteamericana Fanny van de Grift fue la esposa del inolvidable creador de "Dr. Jekyll y Mr. Hyde", entre muchos otros, como por ejemplo, "La isla del Tesoro". Al igual que Gauguin, Stevenson, escocés de Edimburgo, sintió la llamada de las islas y se trasladó a Samoa, donde su quebrantada salud se lo hizo pasar bastante mal, no al igual pero sí parecido al Gauguin que recrea Vargas Llosa en "El Paraíso en la otra esquina", libro que hemos comentado en el Club en el primer cuatrimestre. Stevenson congenió muy bien con los nativos quienes le adoraban y lo llamaban Tusitala ("el contador de historias"). Fanny, una hippie avant la lettre, vivió en Estados Unidos en un pueblo minero siguiendo a su marido, un hombre traumatizado por su participación en la Guerra de Secesión. Conoció a Stevenson en París y enseguida supo que era un escritor irrpetible con un talento prodigioso, casándose con él y conviriténdose en su compañera de vida y, en una suerte de figura maternal y protectora. Alexandra nos brinda el retrato de una mujer moderna, valiente, decidida, nada acorde con lo que se esperaba de una mujer de su tiempo. Un libro y un personaje inolvidables.
Siguiendo el lema de nuestro Club de Lectura:
¡¡¡¡ PARA DISFRUTAR SIN MODERACIÓN!!!
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