lunes, 22 de enero de 2024

PERSONAS COMO YO DE JOHN IRVING

 

        En nuestra próxima sesión comentaremos y analizaremos la novela Personas como yo de John Irving. En un curso donde tratamos del amor, no podíamos por menos que leer la obra de un autor que ha abogado toda su vida por la tolerancia no solo hacia la diversidad sexual y familiar, sino que también reivindica la libertad de cada uno de ser como desee. Todo esto sin ser moralizante, avasallador o políticamente correcto, sino desde la lógica del sentimiento, en lo que esta expresión tiene de más noble.

    Personas como yo es un bildungsroman, que en su sentido literal significa novela de formación. En este género novelístico, el lector es testigo de la evolución personal y vital de un personaje, en este caso William Abbott, hijo de William Francis Dean y de Mary Marshall, más tarde Abbott al casarse con el inigualable Richard Abbott. En Personas como yo, conocemos a William desde su pre-adolescencia hasta la edad madura. 

    Novela llena de referencias literarias (intertextualidad) es también un compendio de los escritores que han formado el imaginario de John Irving. En este sentido, y aunque no es obligatorio haber leído a Dickens para disfrutar de la prosa de nuestro autor, los que así lo hayáis hecho encontraréis muchas claves en esta novela. No en vano, la gran historia de amor de William con la Srta. Frost empezará en una biblioteca y tendrá como pretexto Grandes esperanzas de Charles Dickens. Esta novela disputa a David Copperfield ser la mejor novela de Dickens, aunque me permito discrepar porque Tiempos Difíciles o Nuestro común amigo, me parecen literariamente superiores. Eso sí, Grandes Esperanzas tiene algunos personajes tan excéntricos como inolvidables, por ejemplo Mrs. Havisham, la millonaria al que su novio, un cazafortunas,  dejó plantada en el altar y que vestida de novia, sigue esperando en la sala del banquete no se sabe muy bien qué. La comida del banquete se ha dejado en la mesa y Mrs. Havisham en venganza contra los hombres ha criado a una pupila para que los enamore para luego hacerlos sufrir. Nuestro querido Pip sufrirá por Estella. Dickens creó un sinfín de personajes extravagantes, que se ven reflejados en la narrativa de Irving. Por ejemplo la tía Muriel con sus grandes pechos, opuesta al abuelo Harry y sus afanes transformistas, la prima Gerry, lesbiana permanentemente enfadada, Elaine y su azarosa vida amorosa por no hablar del amor de Bill por la Srta. Frost.

    


    John Irving, novelista total, ha sido un autor que, sin renunciar a ninguna de las características de la novela decimonónica (realismo, crítica social, elementos góticos, perspectiva múltiple) ha sabido adaptarla a la sociedad y al mundo contemporáneos. 
    Así, no son baladí las referencias a Madame Bovary, la inmortal novela de Gustave Flaubert, un escándalo sin precedente en su época por retratar a una joven esposa con ínfulas capaz de escoger sus amantes y pasar de un marido aburrido a todos los niveles.

    

    Madame Bovary es también la referencia principal de Mario Vargas Llosa quien en La orgía perpetua: Flaubert y Madame Bovary rinde un admirativo homenaje a este personaje literario canónico. Es un libro imprescindible para entender los mecanismos de posesión de la literatura y donde no hay exorcista que valga. De lectura obligatoria.

                 

    William Shakespeare es, sin duda, otra referencia literaria mayúscula en este libro. No solo porque es, ex aequo con Miguel de Cervantes, medalla de oro en la historia de la literatura universal sino porque es también un autor que, junto a Ibsen, este por gracia y obra de Nils Borkman, es el más representado en nuestra novela. En Favorite River, la academia preparatoria donde enseña Richard Abbott y estudia William Abbott, al ser un colegio segregado, los personajes femeninos deben ser interpretados por alumnos chicos, lo cual nos lleva al origen del teatro shakesperiano, cuando las mujeres no podían ser actrices. Este hecho que ahora nos parece incongruente y absurdo, constituía sin embargo uno de los factores de comicidad de las obras de Shakespeare. Hoy en día, grandes actrices se han fogueado con las obras de Shakespeare aunque una compañía teatral inglesa, Cheek by Jowl, interpretó Como gustéis solo con artistas masculinos que se besaban y abrazaban. Esto no es muy importante pero si os digo que fue en 1974 cuando ser gay no estaba tan aceptado, se refleja el mérito y la valentía de esta compañía que reivindicó la libertad sexual con el muy respetado y canónico Shakespeare. Por si esto fuera poco, tuvieron las narices de presentar esta obra en el Festival de Teatro de Moscú, no olvidemos que Rusia sigue siendo un infierno homófobo. También esta compañía, fundada por Declan Donnellan y Nick Ormerod fue pionera en incorporar actores negros interpretando otros papeles que no fueran Othello.  Los canónicos y los valientes nunca mueren!!!!

Aquí debajo os pongo algunas fotos de esta mítica interpretación que todavía se recuerda.






    La obra que interpretan los estudiantes de Favorite River es La tempestad, la última obra de Shakespeare que también ha tenido un recorrido muy dilatado en el tiempo al haber sido Caliban un icono de la critica postcolonialista que vio en este personaje, mitad monstruo, mitad humano la encarnación de la sumisión de los nativos en los países colonizados. 

    También es muy interesante que Wlliam Abbot lea a James Baldwin, otro grandísimo de la literatura norteamericana que vivió prácticamente toda su vida exiliado en París por causa de su homosexualidad no aceptada en la Norteamérica de la época pero también por ser uno de los más firmes abanderados de la lucha por los derechos de los afroamericanos. Sus ensayos, que no han sido traducidos, son un prodigio de erudición y análisis del racismo en Norteamérica que siguen siendo válido hoy en día. La habitación de Giovanni fue un escándalo en el momento de su publicación por su tratamiento de la sexualidad. Hoy en día es un libro canónico donde se valora muchísimo más el análisis sobre la búsqueda de la propia identidad frente a las expectativas sociales.
    Si queréis conocer la militancia en todas sus vertientes de este magnífico escritor, no podéis perderos "I am not your negro" de Raoul Peck. Espectacular!!! Os dejo trailer.


    Como habréis visto en vuestra lectura de Personas como yo, las referencias literarias apoyan el mensaje del libro. Autores como Ibsen o Tennessee Williams (este último también homosexual) son una reivindicación de asumirse uno mismo sin que ello sea fácil o no haya precios que pagar.

JOHN IRVING: EL NOVELISTA TOTAL.

    John Irving no solo es un autor intertextual sino también muy intergeográfico. Aunque su base literaria está en Vermont, Nueva Inglaterra, sus novelas transcurren en muchas localizaciones. En Personas como yo, sin ir más lejos, nos trasladamos a Viena donde Bill Abbott cursará su tercer año de Universidad y donde conocerá a Larry Upton y a Esmeralda pero también vamos a ir a Madrid, concretamente a Chueca donde vive el padre perdido de Bill.

    Nueva Inglaterra es un estado muy importante en la historia de la literatura norteamericana, Ahí fue donde empezó la literatura de ese país con la poeta Anne Bradstreet o los revivalistas religiosos como Jonathan Edwards. Es también el lugar de nacimiento de Emily Dickinson, del transcendentalismo de Thoreau, de un crítico del puritanismo como Nathaniel Hawthorne o del creador del complejísimo Capitán Achab de Moby Dick, cómo no Herman Melville. Estos tres últimos escritores están englobados en lo que ha venido a denominarse como el Renacimiento literario de Nueva Inglaterra. Los más contemporáneos J. D. Salinger y Sylvia Plath son también oriundos de este estado, muy orgulloso de ser la cuna de los Estados Unidos. No es por tanto casualidad que la literatura impregne y tenga un lugar de honor en todas las novelas de nuestro autor nacido en este estado.


    John Irving adora a Europa y considera que sus obras son mejor recibidas en el Viejo Continente que en su propio país y aunque sin duda los europeos lo leen extensamente, Estados Unidos lo ha reconocido como uno de sus escritores de referencia, habiendo recibido la totalidad de los premios literarios que ahí se conceden. Evidentemente, hay un sector del público estadounidense que sin duda censuraría bastantes de las páginas del libro, cuando no el libro entero.

   Una de las características de nuestro autor es su capacidad para crear personajes inolvidables que llegan al corazón. Así en Príncipes de Maine, reyes de Nueva Inglaterra, Irving relata las vidas itinerantes y miserables de los temporeros agrícolas a principios del siglo XX.  Pero también nos describe el orfanato dirigido por Wilbur Larch donde vienen a abortar mujeres que ya no pueden alimentar más hijos y donde los niños abandonados en la puerta  crecen con todo el cariño y la mejor atención posibles dentro de unas grandes estreches económicas hasta que sean adoptados por una familia pudiente, lo que no sucede muy a menudo. La frase de Wilbur Larch "Que durmáis bien, Príncipes de Maine, reyes de Nueva Inglaterra", da a estos pobres niños desheredados la sensación de que son lo más importante del mundo para nuestro adorado Wilbur Larch, drogadicto, mujeriego pero poseedor de un gran corazón y una capacidad para la empatía y el amor al prójimo como pocas veces se ha visto en una novela, ni en la vida real. El sesgo político de John Irving nunca queda lejos. De hecho, el traductor de este libro optó por mostrar en el título la gran humanidad del Dr. Larch aunque en realidad el libro se titula The cider house rules (Las normas de la casa de la sidra), titulo que muestra el ojo literario de John Irving ya que esas reglas están colgadas en la pared de los temporeros agrícolas cuando ninguno de ellos sabe leer. En este libro, la defensa del aborto y la crítica a las condiciones de trabajo de los obreros agrícolas en Estados Unidos son los dos puntos de referencia de la novela. Una novela imprescindible. Hay película y es muy buena. Dirigida por Lasse Hällstrom y protagonizada por Michael Caine, Toby Maguire y Charlize Theron con guion del propio Irving, recoge muy bien el espíritu de la novela aunque se queda corta ante la magnificencia de la novela en la que se basa. Aquí trailer.

    Oración por OwenHasta que te encuentreLa última noche en Twisted River o Una mujer difícil son para mí auténticas obras maestras.  Cada una de ellas recrea un momento de la historia de los Estados Unidos, por ejemplo Oración por Owen es un claro alegato contra la guerra del Vietnam además de un extraordinario retrato de la contra-cultura estadounidense. Hasta que te encuentre, la undécima novela de John Irving narra la historia del actor Jack Burns, hijo de una tatuadora de Toronto y de William Burns, un joven organista de Edimburgo adicto a los tatuajes. También el sexo es importante en esta novela y al igual que para Eddie O'Hare la iniciación sexual de Jack correrá a cargo de una chica mayor que él.  En esta novela, las relaciones entre padres e hijos, la ausencia del padre y el anhelo del amor verdadero son los temas principales, todo ello con fondo de tatuajes. La última noche en Twisted River es una novela que se extiende a lo largo de cincuenta años y que narra la huida de un padre y su hijo por una Norteamérica enloquecida. Una mujer difícil es también una magnífica exploración en la vida de una mujer que ha sido concebida, por expreso deseo de su padre, como hija sustituta tras la pérdida de sus dos hijos mayores en un accidente. La relación de Ruth Cole, una niña que su madre no quiere y un padre que no es capaz de estar a la altura de su paternidad, conformarán la compleja vida amorosa de Ruth. Para mí, son las mejores novelas de John Irving. El mundo según Garp y Avenida de los Misterios me parecen inferiores porque los personajes de ambas por razones distintas me parecen extravagantes sin ser totalmente creíbles.

    El último telesilla, la última novela de John Irving es extraordinaria, además de evocar algo de testamento literario, por lo que me resulta muy emocionante.  Esta novela tiene lo mejor de John Irving pero no os recomendaría empezar con ella. Su extensión y su enorme caudal de personajes pueden avasallar un poco. Mejor empezar por las que os he señalado anteriormente y acabar en pleno éxtasis con El último telesilla. 

    John Irving es un novelista irrepetible, el gran continuador de la novela decimonónica, transformándola en un retrato de nuestra época, con el punto de ambigüedad necesaria, la excentricidad adecuada pero sobre todo un creador de personajes únicos, dotados de personalidad y que se incrustan en nuestra alma para quedarse con nosotros. Cada vez que hablo de Wilbur Larch me emociono, es el personaje que me hubiera gustado crear. Mil gracias John Irving!!!



EL LENTO PROGRESO DE LA DIVERSIDAD SEXUAL

    El movimiento LGBTIQ+ (con más iniciales de las que Bill Abbott podría memorizar según sus propias palabras) ha conocido, por lo menos en Europa, una aceptación jurídica (que no siempre social) muy importante de la que solo podemos alegrarnos. Está claro que las opciones sexuales son y deben ser diversas y libres.

    La época del SIDA fue particularmente difícil ya que en un principio azotó a este colectivo aunque alcanzara a otros segmentos de la población. Personas como yo nos muestra muy bien lo que se denominó "la epidemia del SIDA" y las numerosas muertes ocasionadas. Hoy en día esta enfermedad está controlada y medicada por lo que las personas afectadas pueden llevar una vida prácticamente normal. Ni la literatura ni el cine ni el arte han sido inmunes a este tema. Quisiera señalaros una excelente novela Los optimistas de la escritora norteamericana Rebecca Makkai situada en el Chicago de 1985 cuando la enfermedad asediaba y se ignoraba todo sobre ella creando un ambiente fuertemente homófobo y de tintes apocalípticos. Está realmente muy bien!!!


    Hervé Guibert, un escritor francés que fue amante del gran filósofo Michel Foucault, narró en su libro Al amigo que no me salvó la vida, su terrible agonía como enfermo de SIDA pero también cómo reaccionaron sus amigos y seres queridos ante "el apestado" como llegó a saber que algunos le llamaban. Fue un testimonio que impactó muchísimo en el momento de su publicación porque no solo impresionó la descripción de los sufrimientos de Guibert sino también la inmensa soledad que el diagnóstico del SIDA causó en sus portadores. En esta novela, Guibert no dudó en poner a caldo a toda esa intelligentsia hipócrita que, a la hora de la verdad, le dejaron más solo que la una.


    También en el ámbito francés, Tristan Garcia nos brinda en su libro La mejor parte de los hombres una descripción de los años 80 y 90, ebrios de libertad personal y de experiencias nuevas, hasta que la irrupción del sida y su corolario de rechazo acabó con esa explosión de ganas de vivir al límite, entrando en un periodo de puritanismo estricto. Es una muy buena novela que analiza en clave sociológica la irrupción del sida y sus consecuencias en el cambio de mentalidades.


    En este mismo año, se ha publicado en España el libro de otro autor francés Anthony Passeron, quien en Los hijos dormidos describe los estragos que causó el consumo de heroína en muchos jóvenes europeos. Compartir jeringuillas fue uno de los motivos que causó la rápida proliferación del SIDA entre adictos. Passeron, con sensibilidad y delicadeza pero sin caer en ningún tipo de cursilería, narra la historia de su tío Daniel, heroinómano y enfermo de sida. Lo que resulta muy sorprendente y al tiempo tremendamente efectivo es el manto de silencio que la familia decide imponer sobre la enfermedad de Daniel pero también el impacto que la drogadicción y la posterior enfermedad tienen en el seno de una familia corriente del Midi francés que no entiende nada. Es sobrecogedor y al mismo tiempo terriblemente familliar. Buenísima!!!


    Los "drag queens", sean homosexuales o no también han sido filmados. Ni qué decir tiene que "La Jaula de las locas" (La cage aux folles), película francesa de 1978, dirigida por Edouard Molinario e interpretada por Michel Serrault y Ugo Tognazzi, se movía íntegramente por el terreno de la comedia, bastante gruesa. Aquí, una pareja de homosexuales de larga convivencia tendrá que disimular su homosexualidad cuando la hija de uno de ellos se casa con el hijo de una familia muy conservadora. Tuvo tal éxito que ha conocido secuelas e incluso un remake: "Una jaula de grillos", dirigida por Mike Nichols en 1996 con Robin Williams y Gene Hackaman. Un festival de despropósitos.... Os dejo el trailer para que veáis el tono.


    Más simpática y alejada de los tópicos es "Las aventuras de Priscila, reina en el desierto" con un Terence Stamp increíble como "drag queen" muy bien acompañado por Guy Pearce que es uno de los mejores actores de su generación. Película australiana de 1994, dirigida por Stephen Elliott, es un recorrido por la Australia menos turística y más indómita. Un canto a la tolerancia y a los buenos sentimientos. Esta pelicula tuvo un gran éxito y ha acabado convirtiéndose en un musical. Trailer aqui debajo.


    También José Sacristán sorprendió con su caracterización de homosexual con doble vida. Por la mañana abogado que vive con su madre viuda y por la noche transformista en un cabaret. "Un hombre llamado Flor de Otoño", película de 1978 dirigida por Pedro Olea  que nada tiene que ver con las dos películas arriba mencionadas. Si en las dos anteriores, todo es bastante disparatado, en esta se muestra también la concienciación política de un hombre de la burguesía catalana al tener un novio anarquista. Una película que hizo historia y abrió la puerta a películas como "Carmen y Lola", revelación de 2018 dirigida por Arantxa Echevarría que tuvo la valentía de narrar la historia de amor entre dos chicas gitanas en un contexto de fuerte raigambre patriarcal.



       En lo tocante a la transexualidad, han aparecido bastantes novelas que retratan tanto la transición de género como la aceptación o no por parte del entorno familiar y la necesaria salida al mundo exterior. No las he leído pero tengo muchísimo interés en  la novela de Alana S. Portero La mala costumbre que relata el sentido de inadecuación de una niña atrapada en un cuerpo que no reconoce como propio. Es este un libro que ha recibido reseñas muy positivas y  dan muchas ganas de leerlo. Alana S. Portero es una especialista en el tema trans además, por lo que seguro que esta obra está muy bien fundamentada.
   

    Camila Sosa, escritora, actriz y dramaturga argentina transgénero también causó sensación con la publicación de su primera novela Las malas donde describe a un grupo de travestis que se prostituye en el Parque Sarmiento. Este libro, al igual que el de Alana S. Portero describen una realidad que ha preferido ignorarse o guardar en el cajón de los bichos raros pero la sensibilidad y la militancia, además del conocimiento de primera mano hacen de estos libros una interesantísima aproximación a este tema. 


    Sin embargo, antes de Alana S. Portero y Camila Sosa, Eduardo Mendicutti se puso en la piel de una mujer transgénero en su excelente novela Una mala noche la tiene cualquiera donde narra la percepción de la transexualidad en la cultura y la contracultura españolas durante la Transición. Esta novela, situada durante la noche del 23F da voz a La Madelón, quien en su condición de mujer transgénero muestra las conquistas sociales pero también la trastienda reaccionaria de esos momentos históricos en España. Una muy lograda mezcla de política y novela. Muy recomendable!!!


    Quisiera mencionar algunas películas que han tratado el tema transgénero de manera lúdica y me gustaría empezar por una película protagonizada por José Luis López Vázquez, con guion de José Luis Borau y Jaime de Armiñán y dirigida por este último: "Mi querida señorita", película de 1972 que muestra un caso de hombre transgénero que lo ignora pero se viste y se comporta como una mujer. Fue un filme muy transgresor en su momento y aunque no ahonda en los problemas de los transexuales y transita más bien por el terreno de la comedia, mostró a José Luis López Vázquez como un actor versátil capaz de meterse en el papel de una mujer sin resultar histriónico.


    También Glenn Close se atrevió con un personaje de mujer que se viste de hombre en "Albert Nobbs" película de 2011 dirigida por Rodrigo García Barcha. Aquí, Glenn Close interpreta a una mujer que en la Irlanda del siglo XIX decide pasarse por hombre para poder trabajar como mayordomo en un hotel. Es una película estupenda, Glenn Close lo hace sensacional y la cinta contó en el guion con John Banville, un escritor de primera. Os dejo el tráiler.


    Me gustaría acabar esta entrada con una película protagonizada por Hilary Swank una actriz completamente desaprovechada y que sin embargo ha mostrado su valía en películas como "Million Dollar Baby" en el papel de boxeadora cuyo mentor es Clint Eastwood. Una de las mejores películas de este director, que ya es decir. Hilary Swank interpretó a un transgénero en la maravillosa aunque durísima película "Los chicos no lloran". Película de 1999 dirigida por Kimberley Peirce e interpretada por Swank y Chloé Sévigny, nos narra la terrible historia real de una chica transgénero, Brandon Teena, sin ninguna posibilidad en un mundo profundamente machista y homófobo. Es una película extraordinaria por su sensibilidad y su inteligencia. Rodada en forma casi documental, es una película hipnótica.


    Y tras este viaje por los mundos literarios de John Irving, continuemos siempre a

PENSAR LA LITERATURA, PENSAR EL MUNDO.

Y cómo no, la lectura es

    ¡¡¡PARA DISFRUTAR SIN MODERACIÓN!!!