domingo, 22 de septiembre de 2024

HAMNET DE MAGGIE O'FARRELL

 

 En esta primera sesión del Aula de Lectura correspondiente al curso 2024-2025 comentaremos el libro Hamnet de Maggie O'Farrell. Este libro ha sido un enorme éxito de crítica y público ganando el Premio Women's Prize for Fiction de 2020. La mención de este premio no es baladí, Maggie O'Farrell "utiliza" al William Shakesperare de los principios para contar la historia de su mujer. Como bien dice nuestra autora en la Nota al final del libro, aunque la mujer del Bardo ha pasado a la Historia como Anne Hathaway, su padre la llamó Agnes en el testamento por lo que es el nombre íntimo y no el público con el que se ha quedado O'Farrell. Toda una declaración de intenciones.

    Novela narrada desde la intimidad, Maggie O'Farrell decidió dar visibilidad a la mujer de William Shakespeare, a la que dota de cualidades tales como la empatía, el amor por la Naturaleza, la inteligencia natural y una dignidad que cuestiona radicalmente la tan manida frase por machista y despreciativa "Detrás de todo gran hombre, hay una gran mujer".

    También este libro se atreve con la mayor figura (junto a Miguel de Cervantes) de las letras universales: William Shakespeare cuya biografía es muy desconocida ya que solo consta de documentos administrativos. Shakespeare siguió su vocación de actor y dramaturgo pero con la idea de hacer fortuna y volver a Stratford-on-Avon convertido en un rico burgués. La época isabelina es prolija en documentos administrativos, ya se estaba formando el Estado moderno tal y como lo conocemos pero, no debemos olvidar que Isabel I fue la reina de un estado controlador que luchaba por erradicar la religión católica e imponer la reforma de Enrique VIII cuya gestación y ejecución tan bien ha contado Hilary Mantel en su Trilogía de Cromwell

    
    Aunque después del libro de Maggie O'Farrell probablemente esta biografía de Stephen Greenblatt os parecerá un pelín machista, El espejo de un hombre: Vida, época y obra de William Shakespeare, es una muy recomendable biografía de El Bardo porque Greenblatt, especialista de fama mundial sobre la Renaissance inglesa imbrica muy bien biografía con influencias además de brindarnos una visión de la Inglaterra del siglo XVI muy lograda y de un Londres en plena expansión económica y cultural. Totalmente recomendable. 
    Del mismo Greenblatt también es muy notable el libro El tirano. Shakespeare y la política. Y es que Isabel I entendió muy pronto que el teatro podía ser un instrumento de propaganda política en favor de la dinastía Tudor que empezó con Enrique VII tras haber vencido a Ricardo III en la batalla de Bosworth en 1485. El linaje Tudor siempre fue cuestionado por lo que los dramas históricos de Shakespeare venían a reivindicar la absoluta legitimidad de la dinastía Tudor. El padre de Isabel I, además la lió parda con su divorcio y posterior matrimonio con Ana Bolena que dio lugar a la escisión de la Iglesia de Inglaterra de la Iglesia católica. Pero no adelantemos acontecimientos, Thomas Cromwell nos espera en enero.

            

    Tenemos una muy buena adaptación de las obras históricas de Shakespeare titulada "La corona vacía". Puro talento BBC en una magnífica serie que adapta las obras históricas de Shakespeare. Excelente. Os dejo trailer.


   Hamlet y El Rey Lear son probablemente las tragedias más logradas de Shakespeare. En Hamlet sin duda los muertos y sus apariciones, particularmente la aparición de Hamlet padre es el desencadenante de la tragedia. Una muy entretenida adaptación de esta obra la podéis encontrar con "Hamlet" de Kenneth Branagh (1996) que, a pesar de su tufillo a super producción hollywoodense lidia con mucho talento con un personaje tan complejo como Hamlet. Dirigida, adaptada y protagonizada por Kenneth Branagh, reúne lo mejor de los actores británicos y algunos norteamericanos, entre ellos Robin Williams. Trailer aquí debajo.


    La inacción de Hamlet, producto de sus múltiples reflexiones filosóficas y de su ambivalente relación con los conceptos de el Bien y el Mal lo convierten en un personaje profundamente torturado. "Ser o no ser" o "Algo huele a podrido en Dinamarca" forman parte del acervo lingüístico universal. Ofelia, la enamorada de Hamlet a la que las malas decisiones de Hamlet conducen al suicidio ha sido una de las representaciones pictóricas más populares, especialmente para los pintores prerrafaelitas como Dante Gabriel Rossetti. 


    Contextualizado en su época, Hamlet se encuentra en la intersección entre el reinado de Isabel I y el de Jacobo I, época la de este último menos optimista y donde situamos la otra gran tragedia de Shakespeare: El Rey Lear. 

  

    Lo poco que se sabe de la vida de Shakespeare ha dado alas a las teorías más fantasiosas siento la más conocida la del problema de la autoría shakesperiana de la que Derek Jacobi es uno de sus más fervientes defensores. Este grupo, bastante minoritario, todo hay que decirlo, afirma que Shakespeare no fue el autor de sus obras. La razón principal es porque no tenía la instrucción suficiente para haber escrito todas estas obras maestras por lo que tiene que ser la producción de algún noble que no deseaba ser conocido públicamente. Jacobi, entre otros, aboga por otorgar la autoría de las obras de Shakespeare a Edward de Vere, conde de Oxford. Estas teorías no han tenido demasiado recorrido pero si hay terraplanistas, porqué no partidarios del Conde de Oxford como cerebro en la sombra de Shakespeare?

    En 1996, Roland Emmerich realizó una película que planteaba este tema: "Anonymous", protagonizada por Rhys Ifans y Vanessa Redgrave. La película es muy entretenida pero ver a Shakespeare retratado como un ambicioso sin escrúpulos ni talento me molestó. 


    En 2018 Kenneth Branagh realizó una película titulada "El último acto" donde se narran los últimos días de Shakespeare en Londres y su regreso a Stratford convertido en un burgués con posibles. Protagonizada por Ian McKellen y Judi Dench, esta película tiene interés porque recoge la tristeza por la pérdida de Hamnet y el difícil retorno de Shakespeare al hogar familiar. Lo mismo que nuestro libro salvo por el punto de vista, aquí El Bardo, en Hamnet Agnes. Trailer aquí debajo.


    De todos modos, si queréis saberlo todo sobre Shakespeare, el libro de referencia es Shakespeare. La invención de lo humano del malogrado crítico literario Harold Bloom donde con su claridad y amenidad habituales nos brinda el mejor análisis de las obras de Shakespeare. Es un libro de referencia y un ejemplo de cómo hablar con pasión, amor y rigor de un autor y por extensión de la Literatura.


    Dentro de la revisión que se está llevando a cabo de la historia de las mujeres, Maggie O'Farrell nos brinda su propia versión de Agnes a quien en su testamento Shakespeare legó "my second best bed", sin especificar otras propiedades ya que legó todo su patrimonio a sus dos hijas Susanna y Judit. Esto ha propiciado algunas interpretaciones un poco tendenciosas, la más popular es que Shakespeare habría desairado a su mujer. O'Farrell lo deja claro: esa segunda cama es en la que Agnes quiere dormir porque es la cama conyugal, donde sus hijos han sido concebidos y la que compartió con su marido. También podría aludir a un usufructo de la casa. En cualquier caso, fuera de los áridos términos testamentarios, nuestra autora muestra un matrimonio fuera de lo común por la personalidad de sus dos integrantes.

    Maggie O'Farrell no es la primera autora que ha escrito sobre las mujeres de Shakespeare. Así, la excelsa Virginia Woolf escribió en su imprescindible libro Una habitación propia la historia de Judith Shakespeare, la hermana que el escritor hubiera podido tener que por ser mujer y a pesar de tener las mismas cualidades que Shakespeare no pudo ni siquiera cultivarlas por su condición femenina. La falta de independencia económica y de un espacio propio (véanse Jane Austen o Emily Dickinson) condicionó y mucho la trayectoria literaria de numerosas mujeres. 

 

    Germaine Greer, la activista feminista australiana que con su libro La mujer eunuco puso patas arriba la concepción intelectual de la condición femenina publicó en 2009 un libro titulado Shakespeare's wife en el que este icono de la segunda ola feminista cuestionaba y mucho, las ideas normalmente aceptadas sobre Anne Hathaway. Su nula relación con su marido, su analfabetismo absoluto e intentaba rehabilitar la figura de esta mujer en general bastante vilipendiada por la historiografía patriarcal. Creo sinceramente que Maggie O'Farrell no hubiese podido escribir Hamnet sin la decisiva y original aportación de Germaine Greer.

 

    Y hablando de mujeres olvidadas por la Historia, dos libros buenísimos e imprescindibles: 
Las olvidadas y Las desheredadas de Angeles Caso. El primero cubre la difícil historia de las mujeres creadoras en la Edad Media y el Siglo de Oro mientras que el segundo se ocupa de los siglos XVIII y XIX. Con una escritura clara apta para todos los públicos, Caso denuncia la forma en que la sociedad patriarcal relegó a tantas y tantas mujeres creadoras al olvido. Ambos libros valen muchísimo la pena.


    

    Maggie O'Farrell no es solo la autora de Hamnet sino que tiene ya una sólida carrera además de un espléndido futuro como escritora porque creo sinceramente que ha encontrado su voz. Quisiera recomendar muy especialmente El retrato de casada, su penúltima novela es una magnífica y también libérrima biografía de Lucrezia de Médici casada a los quince años con Alfonso d'Este, duque de Ferrara del que se dice pudo haberla asesinado. Una novela magnífica de gran potencia evocadora que también reivindica  la figura de una mujer olvidada por la Historia.
    Si la época de la Florencia de los Médici os interesa, una novela que asimismo protagonizan los Médici y concretamente Cosme de Médici, padre de nuestra desafortunada Lucrezia en la novela de O'Farrell. Se trata de Perspectivas del siempre eficaz y apasionante Laurent Binet, autor de HHHH y de La séptima función del lenguaje que en esta ocasión se atreve con una novela policíaca epistolar. Binet es único y lo demuestra una vez más. Debajo Lucrezia de Médici. 



            


    El pasado mes de julio falleció la escritora irlandesa Edna O'Brien, la Decana de las letras irlandesas, una mujer valiente que luchó contra el integrismo católico de su país y cuyos libros fueron quemados por curas fanáticos. Chica de campo, su novela autobiográfica fue quemada en una pira al más puro estilo Torquemada. Publicaría su autobiografía tiempo después titulada muy significativamente Madre Irlanda. Edna O'Brien no se conformó con describir la Irlanda pacata y oscura retratada también por Benjamin Black en su serie sobre Qurike, sino que tocó todos los palos literarios, desde su aproximación a la guerra en Europa con Las sillitas rojas hasta el suplicio de las niñas secuestradas por el grupo nigeriano Boko Haram que novela en La chica. Su último libro publicado en España Byron in love es un homenaje a este poeta en el bicentenario de su muerte. Totalmente recomendable. Cuando los escritores leen y escriben sobre sus lecturas, es un gozo absoluto. 
    Sirva este muy modesto homenaje para honrar la memoria de una mujer excepcional y una escritora sublime. Todos sus libros valen la pena.

 
 

    De la fértil cantera de la literatura irlandesa, poco hay que decir, Yates, Beckett, James Joyce, Jonathan Swift, John Banville o Colm Toibin por citar solo algunos. Sin embargo, en esta entrada de blog me gustaría hablar de las escritoras irlandesas que siguen manteniendo el pulso de la buena literatura de su país siguiendo la estela de la magnífica Edna O'Brien.

    Una de las más famosas es Sally Rooney cuyo libro Gente normal, la historia corriente de dos jóvenes que se conocen en el Instituto y los vaivenes de su relación ha llegado a considerarse como novela referencial de la generación Millenial. Se ha realizado una serie que ha recibido muy buenas críticas. Os dejo el trailer por si sentís curiosidad.


    Este año Sally Rooney ha publicado nuevo libro Intermezzo donde sigue narrando con naturalidad y sentido del humor las vicisitudes vitales de la generación millenial, según los sociólogos una generación fuertemente digitalizada, hiperconectada, tolerantes aunque de un individualismo feroz. Una autora a seguir que ha conectado muy bien con las preocupaciones contemporáneas.


    Doireann Ní Ghríofa es una joven poeta irlandesa que se ha dado a conocer mundialmente con un libro mezcla de autoficción y obsesión literaria en la que la autora, madre con cuatro niños descubre el texto de una mujer que dos siglos antes había escrito una carta de pérdida a su amado. En Eibhlín Dubh Ní Chonaill, que así se llama la autora, Ní Ghríofa encontrará múltiples resonancias de sí misma. Un ejercicio metaliterario muy logrado y al igual que Maggie O'Farrell una reivindicación de la callada vida de las mujeres.

    

    Emma Donoghue es también una interesantísima autora de novelas claustrofóbicas, con fondo de superstición situadas en la Irlanda rural. Su novela La habitación, narrada desde el punto de vista de Jack, un niño de cinco años, le fue inspirada a esta autora por el caso Fritzl, el ingeniero que mantuvo encerrada a su hija mayor Elizabeth en el sótano de su casa y con la que tuvo siete hijos mientras vivía en el piso de arriba con su mujer. Este horror ha sido convertido por Donoghue en un libro vibrante, que huye de cualquier tópico para centrarse en la recuperación física y mental de un niño que durante sus seis primeros años de vida nunca respiró aire fresco ni tuvo contacto con nadie salvo su madre.
El prodigio segunda novela de Emma Donoghue también se basa en un hecho real, el de una adolescente que sin comer nada logra sobrevivir gracias a su fe. Este hecho la convierte en poco menos que una Santa a ojos de una comunidad pobre y culturalmente dominada por una religión católica fanática. Anna O'Donnell una enfermera inglesa muy inteligente será contratada para verificar que este milagro es cierto. Por supuesto, esta aguerrida mujer considera de partida que todo es un fraude pero luchar contra la superstición y la milagrería no es tarea fácil. Dos novelas estupendas.


    Las películas basadas en estos dos libros están bastante bien y es que cuando hay buen material literario y un mínimo talento nada puede salir mal . Os dejo el trailer de ambas.



    Y después de este pequeño paseo por la Irlanda literaria, sigamos con nuestro lema:

PENSAR LA LITERATURA, PENSAR EL MUNDO.

Y cómo no, la lectura es

    ¡¡¡PARA DISFRUTAR SIN MODERACIÓN!!!